Se llama FC2 y es el nuevo preservativo femenino. Te contamos todas sus características y te enseñamos cómo se usa. ¿Lo usarías? ¿o vas a seguir siendo PATA-PILA?
Se llama FC2 (Female Condom 2) no llegó a la Argentina, pero ya va a llegar. Dicen que será baratito, suave y silencioso. Es que parece que el nuevo amigo tiene ese defecto: hace ruido. Sí, en el mismísimo momento del acto. No sé si es un plop, plop, un flap, flap, no sé, no me imagino, pero todavía no vino nadie a contarme cómo es la experiencia.
Para los que opinan que el trámite con la gomita mata el momento, una puede andar con este cosito puesto hasta ocho horas antes de tener relaciones. Ahora lo importante. Cómo se pone. A diferencia de los forros para caballeros, el condón femenino no viene "enroscado" sobre sí mismo, se parece más a un globito desinflado.
Tiene dos anillos, también de goma blandita y uno, el más chiquito, que es el que hay que introducir. ¡Valor, mujeres, se han metido cada cosa! El otro anillo, más grande, se queda afuera. Es el que viene a hacer tope para evitar que todo el artefacto se pierda en algún recoveco. Por ahí precisamente es que tiene que entrar la herramienta del señorito.
Entonces, se recomienda buscar una posición cómoda a elección, sentada, acostada, levantando una pierna. Si algún caballero piola quiere ayudar, se aceptan sugerencias. Ahora que entró la puntita, hay que meter un dedo, o dos, adentro del preservativo y empujar hasta el mismísimo fondo, igualito que un tampón.
Ojo, que no se enrosque. Listo, ya está puesto. Tiene que haber quedado un circulito de goma abrazando la vagina bien visible desde afuera. Esto puede resultar muy útil para los que no la embocan: por ahí hay que entrar. Y un poco de delicadeza, que el muchacho en su desesperación no nos estropee todo el decorado, no vaya a ser que empuje el preservativo por uno de los costados y rompa la magia.
Para sacarlo enrosquen la parte que queda afuera ¡por favor, después de todo el ajetreo tiene que seguir ahí!, tiren y listo. No sean asquerosos, se usa una sola vez, así que a la basura.
¿Lo usarías? ¿no te lo pondrías ni loca? ¿la sensación será diferente a la del clásico preservativo masculino? ¿y a ustedes, señores, qué les parece?
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